10 Errores comunes de un Freelance y como evitarlos TipNL #01
10 Errores comunes de un Freelance y como evitarlos
Ser Frelance tiene muchas ventajas, creo que las que más destacan son las de poder trabajar desde donde quieras, ser tu propio jefe y controlar mejor tu tiempo. También tiene ciertas desventajas, pero esas las discutimos mejor en otra publicación.
En esta oportunidad quiero exponer los 10 errores más comunes que que comentemos cuando trabajamos como Freelance y algunos consejos para evitar cometerlos o corregirlo si ya sufres de alguno de ellos. Espero te sirvan.
Govinda Valbuena
Fundador e Instructor de Gov3dstudio

1. No tener un acuerdo escrito con tu cliente
Es muy frecuente cuando se trabaja como freelance (Sobre todo al principio) los trabajos que negocies con un cliente se resuelvan con un acuerdo de palabra o con estrechar manos. Luego si el cliente quiere hacer cambios, se retrasa en un pago o simplemente no quiere completar su pago no tienes como demostrar lo que se acordó antes de comenzar el proyecto y las condiciones del mismo.
Solución
Siempre tener un contrato firmado por el cliente donde se explica en detalle el proceso de ejecución del proyecto, tiempos de entrega, costo y condiciones adicionales por su parte o por la tuya.
Un buen consejo es no llamarlo contrato, el término suena que se imponen condiciones sin derecho e negociación por ambas partes, en su lugar lo puedes llamar CONVENIO o ACUERDO, en ellos puedes especificar tus honorarios, tiempo, condiciones para realizar el proyecto y detalles que debes dejar claro antes de comenzar un proyecto.
Si trabajas en desarrollo 3D, publicidad, Diseño Gráfico, Arquitectura o video puedes revisar el Tip Ninja Laboral #03 que explica en detalle la importancia de un convenio, como crear uno y consejos para negociar su contenido con un cliente.
2. No llevar un registro de modificaciones
Los clientes siempre buscan hacer cambios a cada rato o al menos la mayoría, esto se convierte en un problema cuando un proyecto que debía estar listo en 7 días por ejemplo lleva 23 días en ejecución y aún no se le ve fin por que el cliente sigue modificando a diestra y siniestra. Esto sucede por no indicar un límite para las modificaciones o por fallas de comunicación al momento de negociar o durante el desarrollo del proyecto.
En ocasiones incluso el cliente puede alegar no haber solicitado una modificación y que desea regresar a una fase previa y sin un registro de esos cambios es imposible demostrar quién tiene la razón. A todos nos ha pasado pero es algo que puede corregirse.
Solución
En la reunión con tu cliente debes ser muy claro con respecto a tu método de trabajo, tiempos de entrega y el número de modificaciones que le vas a permitir hacer a tu cliente como parte del acuerdo original. Ten paciencia, escucha cada una de sus exigencias, que es lo que quiere y que es lo que necesita. Es preferible una reunión de 4 horas donde todo queda claro a pasar días modificando sin parar.
Con el proceso en desarrollo y una vez que te toque corregir el proyecto asegúrate de que firme todos los cambios realizados en la reunión. Si no se firmaron las modificaciones al momento de la reunión redacta un correo electrónico al cliente justo al llegar a tu casa o espacio de trabajo donde especifiques las modificaciones que se acordaron en la reunión y pide que te las confirme respondiendo el correo, así tendrás un respaldo del proceso.
No te apures! Tómate el tiempo para conocerle mejor, sus gustos, la historia de su empresa, su recorrido, su experiencia laboral; todo esto ayudará a que haya un ambiente de confianza en ambas partes y se entiendan mejor.
3. Regalar tu trabajo
Ser Freelance puede ser difícil, en muchas oportunidades no vamos a contar con un flujo de trabajo constante lo que nos puede llevar en ocasiones a cobrar menos de lo que se debe para obtener un proyecto o en otro caso cobramos muy por debajo pensando que así el cliente nos puede dar más proyectos a futuro.
Al cobrar menos de lo que debes no solo afectas tu reputación como emprendedor sino que también afectas la industria en la cual te desenvuelves al no mantener un sentido de precios ajustados a la experiencia de otros freelance o empresas.
Solución
Saber como cobrar es difícil, en cada profesión hay muchas condiciones que tomar en cuenta como el lugar donde vives, la economía de tu país, tu experiencia, velocidad de trabajo, hardware y software que usas para desarrollar proyectos, gastos básicos, etc.
No hay una fórmula mágica para que sepas como cobrar por tu tiempo pero si hay métodos para hacerte con una idea como por ejemplo investigar las tarifas de tus competidores bien sean freelance o empresas, esto te ayudará a tener una idea más clara de cuanto cobrar.
Ten en cuenta de que como freelance no tienes los mismos gastos y responsabilidades de una empresa con una nómina de empleados, esto es importante al investigar tarifas. Mientras más investigues más completa será tu conclusión.
Si trabajas en desarrollo 3D para Arquitectura y quieres aprender a cobrar tu trabajo revisa este curso gratuito: Como cobrar tus renders? Aprenderás herramientas y verás muchos consejos para calcular el valor de tu trabajo.
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4. Gastar más de lo que debes
Cuando ganamos dinero y el total de la factura es ganancia para nosotros en ocasiones podemos ser imprudentes en como gastamos o invertimos ese dinero. Es común invertir en equipos, oficina, lujos en general para “expandirnos” cuando realmente no es necesario.
Si rindes bien y tanto la calidad de tu trabajo como los tiempos de entrega son excelentes por que gastar en cosas demás si no verás un retorno a esa inversión en un plazo corto de tiempo?
Esto también aplica para quienes deciden gastar en ropa, comida, viajes, etc sin pensar en ahorrar para esos momentos en los que el trabajo no fluye como se espera. Gastar demás es peligroso, puede comprometerte incluso poner en riesgo tu trabajo y quienes dependen de él.
Solución
Invierte poco a poco a medida que lo vayas necesitando. Por ejemplo, si trabajas en visualización 3D y tu PC ahora mismo te permite entregar proyectos en tiempos razonables (Imágenes o animación) mejor mantenerse de esa forma en lugar de invertir por ejemplo en una granja de render de más de $5.000 USD si aún el flujo de trabajo no hace que esa inversión se amortice en el tiempo.
No gastes tanto para un proyecto por que luego cuando baje el flujo de trabajo te quedarán todos los equipos parados sin hacer nada esperando por clientes. Esto aplica para fotógrafos, diseñadores, cocineros, etc, invierte poco a poco.
Crece a medida que la demanda crece, debes ser prudente e invertir cuando el retorno de esa inversión se percibe en un plazo de tiempo corto y solo cuando esa inversión garantiza mejor rendimiento a largo plazo, acompañado por un flujo de clientes estable.
5. No medir las consecuencias de comprar cosas a crédito
Comprar cosas a crédito es fantástico, sobre todo a nivel laboral. Puedes comprar a crédito hardware por ejemplo y ponerlo a producir de inmediato para que “se vaya pagando solo” pero debes tener cuidado, esto puede ser un arma de doble filo si no sabes como controlar el impulso de invertir (Explicado en el punto anterior).
Cuando se acumulan créditos y el flujo de trabajo baje quedarás atrapado en un predicamento entre las deudas y el tiempo que pasan tus equipos parados sin trabajar.
Solución
Un crédito a la vez. Lo mejor es ir poco a poco, un solo golpe al bolsillo a la vez. Es más fácil controlar los pagos mínimos de un solo crédito a perder la cabeza tratando de repartir tus ingresos mensuales en pagos mínimos de tarjetas o créditos aquí y allá. A veces queremos apurarnos pero en ocasiones del apuro solo queda el cansancio, mejor ir prudente con un crédito a la vez y una vez superado brincar a uno nuevo. Siempre que las inversiones se recuperen en corto plazo o te ayuden a ofrecer un valor agregado a tus clientes.
Comprar un equipo a crédito y pagarlo poco a poco a medida que le sacas provecho al mismo es una gran idea para comenzar a hacer crecer el equipamiento en tu espacio de trabajo.
6. No saber cuando decir que no
Aceptamos todo tipo de trabajo, si lo quiere para ayer se lo hacemos, si nos toca madrugar lo hacemos… Son frases que decimos con frecuencia o nos las repetimos a nosotros mismos para convencernos de que no hay problema al aceptar un proyecto.
Luego esto se complica y terminamos pidiendo la que el árbitro marque el final del partido por que la presión es demasiada, los tiempos de entrega muy cortos o creer que el dinero a recibir no vale la pena el estrés generado. O acaso alguno de ustedes no se ha repetido a si mismo estas mismas cosas?
Solución
Simple: Decir no es algo razonable, no es malo. Hay que saber cuando un trabajo representa mucho riesgo, cuando es inviable, o cuando supera nuestras capacidades y puede convertirse en un problema. La agudeza para determinar esto se desarrolla con la experiencia y con el tiempo se va puliendo, mientras más te conozcas y tu velocidad de trabajo mejor será tu capacidad de decir NO.
Reflexiona un poco, toma el tiempo para aprender que el NO es también una respuesta, no extralimites tus capacidades, se prudente y cuida tu salud. Trabajar hasta el agotamiento, amanecer sin dormir, comer mal entre otras cosas no vale el puñado extra de dinero que vas a recibir.
7. Ser impuntual
Llegar tarde a una reunión, entregar un proyecto pasado el plazo, pagar tarde a un proveedor, no pagar a tiempo tus servicios, licencias de programas, etc. Todo esto es extremadamente perjudicial para ti.
Tu imagen con un cliente se puede destruir en un instante sólo con llegar tarde a la reunión programada hace días o con entregar el proyecto un Jueves cuando era para el Martes de la semana pasada. La impuntualidad en todos los aspectos debe ser evitada.
Solución
Organiza tu tiempo, dedica X horas a la semana al proyecto, X horas a la semana a reuniones con potenciales clientes, reuniones con proveedores, inspección de proyectos, correcciones, etc. Procura no llegar a tarde a una reunión, si tenías planeado reunirte a las 3:00 pm con un cliente en su oficina procura llegar 30-45 minutos antes, es mejor esperar a que el cliente espere por ti, además nunca sabes si por el tráfico, renovación de una calle, problemas con el transporte, etc tu hora de llegada pueda verse modificada. Si vas a llegar tarde avisa.
Con respecto a los proyectos procura indicar plazos de entrega razonables. Si sabes que puedes hacer un proyecto en 5 días por ejemplo, por que no cotizar a 8 días?, así tendrás 3 días de colchón para atender algún imprevisto, todo esto siempre que el tipo de proyecto permita estas extensiones de tiempo. Es mejor sorprender al cliente entregando 3 días antes de lo esperado que entregar 3 días después de lo programado.
8. Descuidar tu presencia física
La primera impresión cuenta, un cliente puede imaginar muchas cosas a partir de como luces en una reunión o como luce tu portafolio. Al ser Freelance tu marca eres tú mismo. Asistir en bermudas o ropa casual a una reunión no ayudará a tu imagen, el no cuidar el vello facial, tatuajes, ropa y portafolio es algo que te puede salir muy caro.
Solución
Aprende a lucir mejor y hacer lucir mejor tu trabajo. Con esto no quiero decir que tengas que usar ropa costosa o de marcas importantes para verte bien, realmente todo puede mejorar con un pantalón de mezclilla (Jeans, vaqueros), una camisa blanca, un blazer (Damas o caballeros) y zapatos cómodos.
Es un combo que garantiza una buena presencia. Procura asearte, oler bien sea a algún perfume o al menos oler a limpio y en caso de tener algún tatuaje procura esconderlo, muchos clientes sobre todo sin son mayores pueden verse condicionados por esto a verte de una manera no profesional. Afortunadamente en tiempos actuales esto sucede con menos frecuencia sin embargo es algo a tomar en cuenta. Un apretón de manos firme ayuda mucho.
Tu portafolio es tu tarjeta de presentación, no son solo imágenes al azar presentadas en un Power Point o peor aún en una carpeta de tu USD Drive. Procura imprimir tus mejores trabajos, si son multmedia por que no intentar con un DVD, un video o algo visualmente más atractivo. Si no tienes experiencia en eso considera contratar a alguien que si la tenga para presentar mejor tus trabajos.
9. Miedo a sub-contratar o buscar ayuda
“Todo lo puedo hacer yo sin ayuda de nadie, así me quedará más dinero cuando el cliente pague”. Lo has pensado o no? Seamos sinceros, a todos esa idea nos ha cruzado la cabeza e incluso muchos las hemos practicado con resultados en ocasiones nefastos: Baja calidad del trabajo, retrasos al entregar, cliente insatisfecho o peor aún molesto. Sub-contratar no es malo, es delegar trabajo y repartir responsabilidades.
Solución
Contrata personas que tengan amplio dominio de un área que tu aún no conoces a la perfección. Por ejemplo si tu como cocinero eres experto en entradas y platos principales pero fallas terriblemente con los postres y tu cliente quiere contratar los servicios de comida completos para una boda de 80 personas ¿Qué haces? Te pones a aprender a hacer postres apurado para llegar a tiempo a la fecha de entrega o mejor contratas a alguien para que los haga por ti?
Zapatero a su zapato dice el dicho y no puede ser más cierto, si llega un cliente con un proyecto muy grande o complejo es mejor buscar ayuda de colegas que te den una mano a cambio de un porcentaje del proyecto o un precio fijo por su tarifa, o incluso como un favor, te sorprenderías lo que pueden hacer los amigos en momentos de apuros si les invitas unas cervezas y pizza, además de que puedes devolverle el favor cuando te necesiten.
Delega responsabilidades a personas confiables expertas en esos temas, es mejor ganar el 15% de un gran proyecto a quedarte con el 100% y entregar tarde, que el trabajo no quede bien o el cliente se sienta estafado y no te pague siquiera el trabajo.
10. No saber cuando descansar
Aceptar mucho trabajo, amanecer o quedarte hasta tarde con un proyecto, descuidar a tu familia, tus amigos, tu salud, tus otros clientes solo por aceptar ese jugoso contrato de mucho $$$$$. Error! Debes saber cuando descansar, el cuerpo necesita pausa, relajarse, desconectarse de todo un rato.
Solución
onsigue tiempo para recrearte, divertirte o simplemente hacer algo distinto al trabajo, tu cuerpo y tu mente lo van a agradecer. Podrás rendir mucho más si duermes bien y descansas, te sorprenderías de las cosas que puedes notar en un proyecto o los errores que puedes ver si descansas unas horas y no lo ves por un rato. Es como si una nueva persona entrara a continuar con el desarrollo.
La familia es lo primero, los amigos son la familia que escogemos, procura compartir con ellos, disfrutar, reír, pasear o solo sentarte con un café a conocer como les fue en el día. Conversa y sal de la rutina. Hay cosas mas importantes que el dinero, regálate un viaje periódicamente, conoce nuevas culturas, nuevas personas. Te garantizo que si lo haces cuando te toque un proyecto nuevo las ideas van a fluir solas y el rendimiento será brutal.
Espero mis consejos sean de utilidad y puedan aplicarlos en su día a día. Por que no comentas que te parece? de estos errores cuales has cometido tu o que errores crees que faltan en la lista? Será un gusto poder comentar con ustedes todo esto.
Un abrazo
Govinda Valbuena